La cosa es sencilla: anotas cosas que quieres hacer durante todo el año, convencidos de que lograrás hacer estas metas. Pero luego... empiezas a poner excusas. Excusas y más excusas. Que si no me da tiempo, que si necesito la ayuda de alguien en especial para hacer esto, que no me veo capaz de hacer aquello...
No estoy diciendo que este no sea un buen método de organización, pero hay mucha gente que lo abandona.
Las cosas no se deberían de hacer por un nuevo año. Si realmente quieres hacer algo con toda tu alma, tienes la opción de hacerlo y sentirte bien y realizado, o la de no hacerlo, y que te atormente el hecho de no haberlo hecho.
Las cosas no aparecen por arte de magia. Me refiero, a que si eres vago, intenta esforzarte más (o, directamente, el dejar de ser vago podría ser otra meta a alcanzar en la lista). Nadie nace vago, la vagueza es algo opcional, es como un resfriado, cuanto más lo tengas sin hacer nada al respecto, más avanzará, y al final se convertirá en algo más grave (sinusitis, por ejemplo) y tendrás que hacer un esfuerzo mucho mayor (como puede ser perder tu tiempo en tomar antibióticos). Me estoy yendo por las ramas. Lo que quiero decir, en un día no vas a poder abrir tu tienda. Haz una lista de todos los pasos que tienes que hacer hasta conseguir el resultado, si es un propósito grande, porque si no, no lo harás nunca.
No tengo propósitos de Año Nuevo, tengo propósitos literarios (por decirlo de alguna forma) de Año Nuevo (luego los publico).
Muchas gracias por tener el tiempo de leerme... ¡¡y muchas gracias por todas las visitas!! Me estoy animando muchísimo con la idea de tener ya 80 visitas ._.
Un beso, bye.
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